La Comisión del Parlamento Europeo sobre COVID-19 aprueba el informe de las lecciones de la pandemia
La Comisión Especial del Parlamento Europeo dedicada a la pandemia de COVID-19 ha aprobado hoy, con un respaldo de 23 votos a favor, 13 en contra y una abstención, una serie de sugerencias para mejorar la gestión de crisis y la preparación de la Unión Europea ante futuras emergencias sanitarias.
En su informe, los eurodiputados han examinado el impacto de la pandemia, han evaluado la eficacia de las medidas comunitarias y nacionales, y han formulado recomendaciones específicas para abordar las deficiencias y lagunas en la respuesta a la COVID-19.
Entre las propuestas clave de la comisión se encuentran aumentar la inversión en salud, establecer planes de vigilancia de amenazas emergentes para la salud, llevar a cabo pruebas de resistencia en los sistemas de atención médica nacionales, mejorar la transparencia en las actividades de contratación pública conjunta, fortalecer la autonomía estratégica de la UE en términos de ingredientes farmacéuticos y medicamentos esenciales, y desarrollar una estrategia de la UE para abordar la COVID-19 persistente.
Además, los eurodiputados respaldan una mejor protección del derecho a la información y la libertad de expresión, una comunicación mejorada durante situaciones de crisis y mayor transparencia en los procesos de toma de decisiones. También se insta a una supervisión parlamentaria tanto a nivel nacional como de la UE al adoptar legislación de emergencia, así como a tomar medidas concretas para apoyar a comunidades marginadas, minorías y personas desfavorecidas en tiempos de crisis.
El informe aprobado también destaca la importancia de garantizar la libre circulación de los ciudadanos europeos y evitar discrepancias entre los países de la Unión, como ocurrió hasta la implementación del certificado digital.
Asimismo, se enfatiza la necesidad de priorizar el cuidado de todos los pacientes sin descuidar otras enfermedades, como sucedió durante la pandemia, por ejemplo, el cáncer, y prestar especial atención a la salud mental, una pandemia silenciosa que afecta a un número cada vez mayor de personas.
Para hacer frente a las consecuencias sociales y económicas de la crisis, el informe insta a reforzar la lucha contra la violencia de género, incorporar la perspectiva de género en todas las políticas de la UE y los planes nacionales de recuperación, abordar las necesidades de la creciente población de edad avanzada y establecer normas sobre el trabajo a distancia en toda la UE.
En cuanto a la producción de vacunas, los eurodiputados solicitan un aumento de la inversión y la coordinación internacional, fortalecer la cooperación entre la UE y la Organización Mundial de la Salud (OMS) para mejorar el Reglamento Sanitario Internacional y abordar cualquier deficiencia en el nuevo tratado sobre pandemias.
En este contexto, el informe busca encontrar una solución «constructiva» en relación con la protección de la propiedad intelectual de las vacunas y otros productos sanitarios desarrollados para hacer frente a emergencias sanitarias.
Después de la aprobación de esta resolución, la Comisión Europea deberá tomar medidas acorde a estas sugerencias y presentar las iniciativas pertinentes para construir una Unión Europea que sea más resiliente ante las adversidades y esté preparada para enfrentar el futuro.
«Europa debe preparada para actuar con rapidez, eficacia y en interés de todos los europeos en tiempos de crisis»
Ha defendido durante la pandemia, La presidenta de la comisión, la socialista belga Kathleen Van Brempt, «quedó claro que Europa no sólo necesita las herramientas para desarrollar políticas a largo plazo, con objetivos y hojas de ruta claros».
La UE debe evaluar su papel en la respuesta global a la pandemia y comprometerse aún más con la cooperación internacional y la solidaridad, especialmente con los socios del Sur Global. El informe refleja el resultado del diálogo, el consenso y la rigurosidad. Es necesario reforzar la UE para proteger a los trabajadores de la salud, impulsar la investigación, combatir la desinformación y fortalecer el sector farmacéutico.
La pandemia ha destacado la necesidad de reducir la dependencia de terceros países en el ámbito de la salud. Se deben aprovechar el talento y los profesionales para aumentar la producción de medicamentos y mejorar las cadenas de suministro. El informe fue elaborado después de un año de estudio, con misiones de investigación, audiencias y la participación de comisarios y representantes de gobiernos de la UE y el mundo.