Padres denuncian la ambigüedad de la propuesta para penalizar terapias de conversión
Padres de menores con disforia de género han criticado la nueva propuesta legislativa que busca sancionar con penas de entre seis meses y dos años de cárcel las “terapias de conversión”. Consideran que el texto plantea una penalización “de forma ambigua”, lo que podría criminalizar la labor paterna bajo la excusa de proteger a sus hijos.
Conceptos subjetivos y falta de consenso científico
La asociación AMANDA alerta de que la reforma se basa en definiciones como “identidad sexual” o “expresión de género”, conceptos que, a su juicio, “no tienen base científica sólida ni consenso médico”, y podrían llevar a confundir orientación sexual con identidad de género.
Precedente normativo y urgencia política
La iniciativa, promovida por el PSOE, está en proceso de modificar el Código Penal para castigar estas prácticas, elevando su estatus de infracción administrativa —actualmente sancionable con multas— a delito con penas de prisión. La propuesta ya ha sido admitida a trámite en el Congreso con el rechazo de Vox.
¿Derecho a educar o criminalización de los padres?
Los críticos defienden que los progenitores deberían conservar el derecho y deber de proteger emocionalmente a sus hijos ante episodios de disforia sin temor a represalias legales. En contraste, los defensores del texto subrayan que es una “deuda histórica” con las personas LGTBI y una vía para protegerlas de prácticas humillantes y potencialmente torturadoras