Liberadas nueve mujeres que eran explotadas sexualmente en Bilbao
La Policía Nacional ha arrestado en Bilbao, Barakaldo (Bizkaia) y Castro Urdiales (Cantabria) a nueve individuos acusados de presuntos crímenes relacionados con el tráfico de seres humanos con fines de explotación sexual, coacción a la prostitución, favorecimiento de la inmigración ilegal, tráfico de estupefacientes y pertenencia a una organización criminal. Durante la operación, se han rescatado en la capital vizcaína a nueve mujeres que eran víctimas de trata y estaban siendo explotadas sexualmente por dicha organización.
En un comunicado, la Policía informó que la investigación se inició cuando una mujer se presentó en la Brigada de Extranjería y Fronteras de Bilbao para denunciar que estaba siendo víctima de explotación sexual.
En su declaración ante los agentes, explicó que había llegado a España atraída por una oferta de trabajo como limpiadora, pero una vez en Euskadi, la persona con la que había contactado la envió a una dirección en Bilbao donde le informaron de que, en realidad, había venido a ejercer la prostitución en lugar de trabajar como limpiadora.
Las condiciones impuestas eran trabajar todo el día con solo dos horas libres, recibiendo solo el 50 por ciento de lo ganado en cada servicio sexual, realizar sexo oral sin protección y transportar drogas a diferentes lugares donde se encontraban los clientes, incluso consumiendo cocaína con ellos si así lo deseaban, algo que para ella fue un gran desafío ya que nunca había consumido drogas anteriormente.
La víctima también reveló que en varias ocasiones tuvo que ir al Hospital de Basurto, donde un cliente estaba ingresado, para llevarle cocaína y prestar servicios sexuales.
Dada la gravedad de los hechos relatados y la credibilidad de su testimonio, los agentes le otorgaron de inmediato el estatus de testigo protegido y le informaron sobre sus derechos como víctima de trata de seres humanos, como la posibilidad de obtener un permiso de residencia y trabajo, el retorno asistido a su país de origen si colaboraba con la investigación, o la opción de ser derivada a recursos asistenciales y alojamiento proporcionados por las autoridades.
Además, otras dos compañeras de la primera víctima, también designadas como testigos protegidos, comparecieron en la Jefatura Superior de Policía de Bilbao para confirmar lo que ella había relatado y afirmaron que las utilizaban como «mulas» para llevar cocaína a los clientes, instruyéndolas para persuadir a los clientes a probarla en caso de que no fueran consumidores habituales.
Después de realizar las investigaciones pertinentes, los agentes corroboraron los testimonios de los testigos protegidos y descubrieron que la banda estaba compuesta por nueve miembros, en su mayoría de origen hispanoamericano, que se dedicaban a explotar sexualmente a mujeres captadas en Hispanoamérica en un local ubicado en la calle Pintores Zubiaurre, en el barrio de Ametzola. Además, se descubrió que estaban explotando al menos a nueve mujeres, todas en situación irregular en el país.
Por lo tanto, una vez recopiladas pruebas suficientes y con la preceptiva autorización judicial, el 26 de abril se efectuó una entrada y registro en el local investigado. En el momento del registro, se localizó a cuatro mujeres ejerciendo la prostitución coactivamente y se intervinieron 3.300 euros en efectivo, un ordenador portátil, cuatro teléfonos móviles, varias dosis de Viagra, 300 gramos de cocaína, una balanza de precisión y numerosa documentación relacionada con estos delitos.
Para concluir la operación, se procedió a la detención de los 9 sospechosos en Bilbao, Barakaldo y Castro Urdiales (Cantabria), siendo puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Bilbao, que instruye la causa.
