La población residente en España alcanza un máximo histórico de 49,4 millones tras crecer en casi medio millón en un año
La población residente en España ha alcanzado un nuevo máximo histórico con 49,4 millones de personas, tras aumentar en casi 500.000 habitantes en el último año, según los datos provisionales publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este crecimiento se debe principalmente al aumento de la población extranjera, que compensa el descenso de la natalidad y el envejecimiento de la población nacional.
El impulso migratorio sostiene el crecimiento demográfico
Durante el último año, el número de personas nacidas fuera de España ha crecido en más de 600.000, mientras que la población de nacionalidad española ha disminuido ligeramente. Las comunidades autónomas con mayor incremento poblacional son Madrid, Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía, que concentran más del 60 % del aumento total.
El INE destaca que el crecimiento demográfico español sigue apoyándose en la inmigración laboral y familiar, con especial protagonismo de ciudadanos procedentes de América Latina y Europa del Este. Sin embargo, advierte de los retos estructurales que plantea el envejecimiento: la proporción de mayores de 65 años supera ya el 21 % de la población. Expertos en demografía subrayan que, sin la llegada de nuevos residentes, España habría registrado una pérdida de población por segundo año consecutivo.
