Manuela Carmena aboga por contar con los mayores para impulsar el mundo rural: «Hay que darles proyecto»
La excalcadesa de Madrid Manuela Carmena ha abogado por «unir los dos talentos» de las personas jóvenes y las mayores para acometer los proyectos de impulso a las zonas rurales, ya que defiende que en ellas «hay muchas personas ancianas y no podemos darles solamente bienestar, hay que darles proyecto».
En este sentido, Carmena ha señalado que la vejez «tiene mucho talento» procedente de la «acumulación de la experiencia» a lo largo de la vida, además de que, a su juicio, «la pregunta que nos tenemos que hacer» para combatir la despoblación y los problemas del mundo rural es «por qué ha pasado, por qué estamos donde estamos», y algunas de esas personas han sido «semillas» de ese proceso.
«Los viejos tenemos una de las cualidades que son muy necesarias: que hemos sido testigos de la historia», ha apostillado la exalcaldesa, añadiendo que «la aportación de los viejos es importantísima; tenemos un claro proyecto de seguir en activo».
Carmena ha abordado este asunto en un encuentro con los medios en el que ha participado este miércoles en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander con motivo del curso titulado ‘Juventud y talento: construyendo juntos/as futuro en el territorio’.
En este sentido, la exregidora madrileña cree que primero se debe conocer «por qué» ha ocurrido el vaciamiento de los territorios para a continuación pensar qué hacer para rebatirlo, y en su opinión es uniendo el talento de los jóvenes con el de los mayores como se puede «dar una respuesta».
En el encuentro, Carmena ha estado acompañada por la directora general de Políticas contra la Despoblación del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco), Juana López; el secretario general para el Reto Demográfico, Francesc Boya; y una de las jóvenes que ha participado en la primera edición de la iniciativa ‘Campus Rural’, Rocío Vila.
Como han explicado, este proyecto del Miteco surgió para que los universitarios hagan prácticas en territorios rurales e impulsen el cambio desde ellos.
Y es que, como ha señalado la directora de Políticas contra la Despoblación, es «esencial» generar oportunidades para jóvenes en este medio. «La lucha contra la despoblación es una lucha contra la desigualdad. Cuando hablamos del reto demográfico hablamos del reto democrático», ha explicado.
Los responsables del Miteco han destacado cómo en las últimas décadas la tendencia de la población ha sido concentrarse en los entornos urbanos, por lo que han puesto en valor la importancia de cursos como el iniciado en la UIMP para reflexionar sobre el medio rural y sacarlo de «los tópicos en los que algunos quieren encorsetarlo».
Así, han reivindicado la necesidad de reflexionar en este tipo de foros sobre asuntos como el cambio climático o las alianzas entre las ciudades y los pueblos, ya que las primeras «son muy grandes pero poco capaces de abastecerse» y necesitan de lo rural para «poder sobrevivir».
Para Boya, estos territorios «tienen que ser cada vez más complejos» para lograr que se desarrollen más actividades de las que habitualmente se vinculan a ellos, como esas «más agro». Así, ha apostado por trabajar para que puedan retener talento o incorporarse al mundo digital, aprovechando que ahora la tecnología «permite hacer casi lo mismo que desde las ciudades».
«No hay pueblos sin futuro, hay pueblos sin proyecto», ha defendido el secretario general, que también, preguntado por los medios, se ha referido a las quejas de algunos turistas acerca de las actividades rurales y ha pedido a los que visitan los pueblos «ser respetuosos» con ellos. «Es una cuestión educacional, hay que hacer mucha pedagogía y pedir mucha sensibilidad y mucha complicidad», ha sostenido.
Campus rural
Finalmente, la joven que ha participado en la iniciativa ‘Campus Rural’ –de la que se está preparando una segunda edición– ha relatado cómo este programa le ha «cambiado la vida». «Me encanta que hayan puesto en valor a los jóvenes, que somos agentes de cambio. Tenemos las ganas y la motivación de generar impacto en los pueblos donde vamos a llegar», ha dicho.
Ha asegurado que ha podido aplicar lo aprendido en la universidad y «ver el impacto en el mundo rural», gracias a que ha organizado pequeños espacios de reunión –algunos de mujeres– y ha comprobado cómo han dado lugar a «cambios de mentalidad» y «abertura de mentes». «Me sentía una más del pueblo», ha asegurado Vila, celebrando que la experiencia le ha servido para reafirmarse como «mujer, docente y orgullosa del mundo rural».
Finalmente, ha destacado que los pueblos «tienen sus problemas, que tenemos que atender», y ha defendido que «los jóvenes tienen que ser parte de la solución».
