La Cámara Baja da luz verde al mayor recorte fiscal de la historia de EE.UU.
El pasado 3 de julio, la Cámara de Representantes aprobó por estrecho margen el ambicioso paquete fiscal impulsado por Donald Trump, conocido como el “One Big Beautiful Bill”. La votación fue de 218 contra 214 votos, con solo dos republicanos disidentes y todo el bloque demócrata en contra; el texto ya contaba con luz verde del Senado, tras el voto de desempate del vicepresidente J.D. Vance.
Reforma fiscal y recortes sociales
Este megaproyecto prolonga los recortes impositivos del plan de 2017, introduce nuevas deducciones—especialmente para propinas, horas extras y familias con mayores de 75 000 USD—y eleva el techo de la deducción estatal y local (SALT). Las familias con hijos y jubilados recibirán un beneficio añadido, mientras se invierte fuertemente en defensa y seguridad fronteriza.
Impacto en la sanidad y el déficit
Para compensar, se recortan 1,2 billones de dólares del gasto social: Medicare, Medicaid y los programas de asistencia alimentaria serán objeto de ajustes, incluidos requisitos de trabajo. Según el Congressional Budget Office, el déficit nacional aumentará en unos 3,3 billones en la próxima década, y casi 12 millones de personas podrían perder la cobertura médica.
Trump presume de un “recorte histórico”
El presidente se apresta a firmar la ley este 4 de julio, Día de la Independencia, y calificó la medida como “el mayor recorte fiscal de la historia”, asegurando que será “fantástico para la economía y para la frontera con México”.
