El 70% de los hogares europeos están libres de humo, aunque en España se fuma en más de 4 de cada 10 hogares
El 70 por ciento de los hogares europeos están libres de humo, según un importante estudio realizado por la Sociedad Europea Respiratoria, que muestra que, aunque la proporción de estos hogares está creciendo, el progreso es demasiado lento y algunos países han avanzado más que otros, como es el caso de España que se encuentra por debajo de la media ya que en más de 4 de cada 10 hogares se sigue fumando.
El estudio que ha contado con la participación de la investigadora española Olena Tigova, de la Unidad de Control del Tabaco del Instituto Catalán de Oncología, Barcelona (España), quien es una de las autoras, incide que la importancia de realizar más esfuerzos para proteger a los niños y adultos de los efectos sobre la salud de respirar humo de segunda mano en el hogar.
Grecia ocupó el último lugar entre los 12 países encuestados, ya que se permite fumar en más de la mitad de los hogares. En Rumania, Bulgaria, como en España, se permite fumar en más de cuatro de cada diez hogares; Inglaterra obtuvo la puntuación más alta de los 12, con más de ocho de cada diez hogares libres de humo, seguida por Irlanda, Letonia e Italia, según señala el estudio publicado en ‘ERJ Open Research’.
«La exposición al humo de tabaco ajeno, en cualquier entorno, es perjudicial tanto para los adultos como para los niños. Desde 2004, muchos países europeos han introducido normativas para prohibir fumar en lugares públicos. Sin embargo, los entornos privados, en particular los hogares, siguen siendo lugares habituales de consumo y exposición al humo de tabaco», afirma Olena Tigova.
Con esta investigación, se ha querido examinar las normas sobre consumo de tabaco en el hogar de la población general de Europa. Aunque se han realizado algunas encuestas nacionales, no se ha realizado ninguna encuesta multinacional en Europa desde 2010. Para analizar esta cuestión, se encuestó a unas 1.000 personas en cada uno de los 12 países que participaron en la investigación (11.734 personas en total).
Estas personas fueron seleccionadas cuidadosamente para representar a la población de cada país y fueron entrevistadas cara a cara en 2017-18. Se les preguntó si estaba permitido fumar en algún lugar dentro de sus hogares y, de ser así, si había alguna restricción al respecto.
De esta forma, la encuesta reveló que aproximadamente el 70% de las personas entrevistadas no permite fumar en ningún lugar de su casa. Otro 18% afirmó que existen algunas normas, pero que no están completamente libres de humo. Sorprendentemente, aproximadamente el 13% de las casas en las que no viven fumadores permite que las visitas fumen
La proporción de hogares libres de humo según país, de mayor a menor, fue: Inglaterra 84,5%; Irlanda 79,4%; Letonia 78,9%; Italia 75,8%; Alemania 75,0%; Portugal 74,0%; Polonia 69,6%; Francia 65,1%; España 57,6%; Bulgaria 56,6%; Rumania 55,2%; y en último lugar Grecia 44,4%.
«Los países del norte de Europa tienen más hogares libres de humo, mientras que Europa del Este y los países menos ricos tienen más hogares con reglas parciales para fumar, lo que permite fumar en áreas específicas o en ciertas ocasiones», analiza Olena Tigova.
Los investigadores también analizaron otros factores que parecen influir en las normas sobre fumar en el hogar. Descubrieron que las mujeres, las personas mayores, las personas con un nivel de educación más alto y las que viven con niños tienen más probabilidades de tener hogares libres de humo.
«Nuestros hallazgos sugieren que los hogares sin humo están aumentando gradualmente en Europa a un ritmo de aproximadamente un 1% cada año. Sin embargo, a este ritmo lento, podrían pasar otros 30 años hasta que todos los hogares de Europa estén libres de humo. Para acelerar el proceso, son esenciales medidas más estrictas de control del tabaco», señala Tigova.
«La ampliación de las leyes antitabaco en los lugares de trabajo, los espacios públicos y algunas áreas privadas como los automóviles, combinadas con nuevas estrategias para reducir el consumo de tabaco en el hogar, ayudarán a que más hogares europeos estén libres de humo antes», añade.
Los investigadores planean ampliar su estudio para examinar los niveles de vapeo en los hogares europeos y la exposición al humo de tabaco ajeno y a los vapores de los cigarrillos electrónicos en los automóviles. También están estudiando la mejor manera de alentar a las personas a que conviertan sus hogares en lugares libres de humo.
Filippos Filippidis, presidente del Comité de Control del Tabaco de la Sociedad Respiratoria Europea, profesor adjunto de salud pública en el Imperial College de Londres (Reino Unido) y no participó en la investigación, afirma que, «si bien es positivo ver que cada vez hay más hogares libres de humo, esta encuesta revela que hay países que se están quedando muy atrás y que el progreso es demasiado lento».
«En toda Europa, millones de personas siguen fumando y millones más están expuestas al humo de tabaco ajeno. Hacer que nuestros hogares sean lugares libres de humo protege a niños y adultos del humo de tabaco ajeno y puede ayudar a los fumadores a reducir su consumo o a dejarlo también. El coste de fumar en Europa, tanto para el erario público como para la salud pública, es demasiado alto. Necesitamos leyes integrales para espacios libres de humo y apoyo gratuito para ayudar a la gente a dejar de fumar», concluye.