Dos investigados en el ‘caso Koldo’ relacionados con De Aldama se desvinculan de la trama ante el juez
Luis Alberto Escolano y César Moreno García, ambos investigados en el ‘caso Koldo’, se han desvinculado este lunes de la presunta trama que habría pretendido enriquecerse con la adjudicación de contratos para la compra de mascarillas en pandemia.
Según fuentes jurídicas consultadas por Europa Press, sólo han respondido a preguntas de sus defensas y se han limitado a negar esa relación con los contratos investigados por los que ya se ha abierto causa incluso contra el exministro José Luis Ábalos en el Tribunal Supremo.
En declaraciones a los medios al término de las declaraciones, el abogado de la acusación popular de Liberum, Aléxis Aneas, ha señalado que el interrogatorio de las defensas se ha acotado al objeto principal del procedimiento, los contratos para la adquisición de mascarillas con destino al Ministerio de Transportes y a las comunidades autónomas de Baleares y de Canarias.
Así, ha lamentado que se haya obviado en esas preguntas el contenido del último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que les vincula «con otro tipo de actuaciones en relación a unas empresas con domicilio social en Portugal».
«Prácticamente su testimonio no ha aportado nada nuevo sobre lo que realmente a nuestro entender es importante. Y es cómo mediante estas sociedades –extranjeras– se pretendió por parte de algunos funcionarios un beneficio para poder conseguir una licencia como broker o distribuidor de productos farmacéuticos», ha detallado.
Aneas ha aprovechado su intervención ante los medios para analizar la declaración voluntaria del pasado jueves del presunto conseguidor de la trama, Víctor de Aldama, y ha reseñado que sopesan pedir diligencias pero que esperaran a ver qué pasos da el fiscal Luis Pastor.
«En función de las diligencias que el Ministerio Fiscal emprenda, de las piezas separadas que él solicite su apertura o la ausencia de las mismas, entonces emprenderemos (…) una batería de diligencias porque consideramos que lo que se dijo son cuestiones muy graves que merecen una investigación al menos, sea cual sea su destino final», ha enfatizado.
El letrado de otra de las acusaciones populares, Hazte Oír, ha coincidido en señalar que han negado que empresas de las que eran socios tuvieran vinculaciones con contratos públicos de mascarillas o de servicios sanitarios.
Cabe recordar que este mismo lunes también se esperaba la declaración de Igancio Díaz Tapia, otro de los investigados, que pertenecía al chat de ‘los cuatro mosqueteros’ –que aparece en informes de la UCO–, y que está muy vinculado a Soluciones de Gestión –empresa en el núcleo de la trama–.
No obstante, se ha acordado que esa comaprecencia se celebre el martes, junto a las declaraciones de los también investigados Javier Serrano Costumero y María Piedad Losada Romo –quien fuera secretaria de De Aldama–.
El informe del fiscal
En el informe del fiscal solicitando estas declaraciones, al que tuvo acceso Europa Press, se explicaba que de la investigación se desprende que Díaz Tapia, Escolano Marín, Moreno García, Serrano Costumero y Losada Romo –detenidos por la Guardia Civil en un primer momento– podrían haber participado en un delito de blanqueo de capitales y estarían todas ellos «especialmente vinculados con Víctor de Aldama» –el conseguidor de la trama–.
Apuntaba además que a los cinco se les podría imputar el delito de integración en organización criminal e, incluso, «por su participación en los pagos realizados a otros investigados que desempeñaban funciones públicas, bien de forma directa o por medio de terceros, también se les ha de imputar a Díaz Tapia, Escolano Marín y Serrano Costumero un delito de cohecho».
En un atestado del pasado mes de febrero, la UCO sostenía que De Aldama y otros tres investigados que se hacían llamar los «4 mosqueteros» en un chat de ‘Whatsapp’, habrían abonado 10.000 euros en efectivo a Koldo García, el exasesor del que fuera ministro de Transportes José Luis Ábalos.
En ese informe incluía extractos de las conversaciones que algunos de los investigados mantuvieron antes de su detención. En concreto, los agentes se centraban en el grupo de WhatsApp que estaría compuesto por De Aldama, Díaz Tapia, Serrano y Moreno. Los tres últimos, que mantendrían «vínculos» con Koldo, y habrían ayudado a De Aldama a llevar a cabo «una despatrimonialización» de sus fondos en España.
En sus conversaciones, todos ellos se referían a Koldo como «K». «Mañana tienes que ir a la cafetería Soto Verde que está detrás del Ministerio y llamar a K y decirle literal: Que estás en el verde, que traes una cosa de Nacho para darle y que si puede ir», escribió Díaz Tapia en uno de sus mensajes, facilitando a su interlocutor el contacto de Koldo, que aparecía con el añadido «asesor ministro».
Para los agentes, «el hecho de que Koldo sea identificado» bajo ese seudónimo resultaba «uno de los hitos fundamentales» para la investigación, porque el examen de la información del móvil de Moreno habría permitido «localizar referencias a que se habrían producido pagos» al exasesor de Ábalos.
Los tickets en República Dominicana
En otro de los mensajes, Moreno le envía a Serrano una captura de pantalla en la que se ve el título «gastos fijos» con una referencia: «K 10.000». Los agentes sostenían en ese informe que podría tratarse de un pago al exasesor después de que, durante el registro de su domicilio, se encontrase una anotación manuscrita en una de sus agendas. «Metálico 10.000», apuntó Koldo en la misma.
La Guardia Civil localizó además, según ese informe de febrero, una conversación de octubre de 2021 en la que De Aldama envió un mensaje al grupo. «Podría mirar los tickets que tenemos en RD (República Dominicana). El domingo va el hermano de K, a ver qué le podemos dar», escribió. Los agentes consideraron que los tickets podrían ser, en realidad, dinero, y el hermano de K sería Joseba, que también se encuentra investigado en la causa.
Al día siguiente, De Aldama volvió a chatear. «Por favor decirme lo de los tickets que va quien sabéis el domingo y ahora sí que no quiero líos», avisó. Díaz Tapia, por su parte, respondió: «Hablo con ellos para que lo dejen preparado».
«El ministro da el ok seguro»
Los análisis del Instituto Armado también revelaron la conversación de Moreno con Serrano en la que ambos hablaban de una reunión. «Un éxito. Eran un gordo y un subnormal gay. Era el jefe de gabinete. Ellos están convencidos. El ministro da el OK seguro. Y lo único que puede frenarlo es que tienen que dar el OK de Sanidad, y eso no depende de ellos», le explicó Serrano.
Unos minutos más tarde, ambos retomaban la conversación. «Nos acaban de avisar que el ministro ha dado el OK. Estamos IN. Pídete dos», celebraba Serrano. Diez días después de esa conversación, el 20 de agosto de 2020, Moreno envió a Serrano dos pantallazos de la Wikipedia de Salvador Illa, por entonces ministro de Sanidad.
Tanto Serrano como Moreno volvieron a compartir algunos mensajes en enero de 2022. Moreno, en concreto, envió a Serrano una fotografía en la que se observan dos fajos de billetes en efectivo, uno de ellos en el interior de una bolsa de plástico transparente y otro con gomas.