Andalucía valora la Estrategia de Cuidados pero pide «no obviar» las residencias y escuchar las propuestas de las CCAA

La Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad ha valorado la aprobación en el Consejo de Ministros del pasado martes de la nueva estrategia estatal de cuidados propuesta por el ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2023, Pablo Bustinduy, resaltando que «cualquier política de desinstitucionalización nos parece bien siempre que no se obvie la necesidad de los centros residenciales para determinados perfiles, así como que cada impulso vaya acompañado de financiación para su mantenimiento».

«Desde Andalucía defendemos la libertad de elección y para ello es imprescindible que exista la disponibilidad de recursos del catálogo para que se pueda elegir», han resaltado fuentes del departamento que dirige Loles López, en declaraciones a Europa Press, al tiempo que han pedido al Gobierno que «abra esta estrategia a la participación y tenga en cuenta las propuestas de las comunidades autónomas».

Cabe recordar que la estrategia aprobada este pasado martes bajo el título ‘Estrategia estatal para un nuevo modelo de cuidados en la comunidad: Un proceso de desinstitucionalización (2024-2030), tendrá una dotación inicial de 1.300 millones con cargo a fondos europeos. Tiene como objetivo acabar con el modelo de las macrorresidencias, incentivar los cuidados en domicilio y mejorar las condiciones laborales y salariales de los trabajadores del sector de los cuidados.

Desde la Consejería de Inclusión Social han recordado que la comunidad autónoma andaluza «gestiona el sistema de dependencia más grande e importante de todo el país –uno de cada cinco personas dependientes en España son atendidas en Andalucía», y lo hace «prácticamente a pulmón», puesto que «siete de cada diez euros los pone Andalucía».

En este punto, han puesto de relieve que el Gobierno andaluz de Juanma Moreno » ha tomado medidas sin precedentes que suponen una mejora sustancial en el sistema de dependencia» de la región, una mejora que «se traduce, por ejemplo, en tres subidas desde que Moreno es presidente del precio/hora del servicio de ayuda a domicilio después de permanecer congelado 13 años, pasando de 13 euros la hora a 16,15». «Esto significa que el precio/hora de la ayuda a domicilio registra una subida del 24,2% respecto a los 13 euros en los que permaneció congelado por más de una década», han aseverado.

Inclusión Social también ha resaltado la subida del precio de la plaza concertada en los centros de día y centros residenciales, tanto para mayores como para personas con discapacidad en situación de dependencia, al tiempo que ha subrayado la creación de 4.553 plazas residenciales. «Solo en 2023 hemos incrementado las plazas en 1.970, frente a las 283 creadas entre los años 2015 y 2018 por el PSOE», ha subrayado.

«Superamos las 47.700 plazas para personas en situación de dependencia, pero es necesario ampliar estos recursos tras décadas para facilitar la creación de plazas», ha advertido la Junta, subrayando la línea de ayudas lanzada por el Ejecutivo andaluz de 73,3 millones para construcción y ampliación de centros destinados a mayores y personas con discapacidad en situación de dependencia que ya está en fase de baremación.

Así, la Consejería ha recalcado su apuesta por un modelo centrado en la persona al objeto de «humanizar el sistema y que las personas mayores se sientan como en casa». A este respecto, ha citado las obras de la residencia de mayores de La Orden (Huelva), donde se van a crear dos unidades de convivencia por planta en la que se incluyen salas de estar y comedores comunes y habitaciones dobles totalmente adaptadas por unidad. Las obras que se están cometiendo en este centro titularidad de la Junta supondrá pasar de 141 plazas a 81 plazas.

Organizaciones andaluzas de mayores aplauden la estrategia 

Por su parte, la Federación de Organizaciones Andaluzas de Mayores (FOAM) ha aplaudido que esta estrategia busque «fomentar los cuidados a domicilio y en entornos comunitarios en lugar del modelo de macrorresidencias» e implica «superar la arraigada cultura asistencialista y avanzar hacia modelos de cuidados y apoyos centrados en el respeto y la garantía de derechos y dignidad de las personas, donde los cuidados y apoyos se centren en la voluntad y preferencias de las personas, que puedan elegir dónde, cómo y con quién vivir, en igualdad de condiciones con las demás personas».

Las organizaciones andaluzas de mayores han celebrado el plan y han señalado que «ser cuidado cuando se necesita es un derecho y cuidar es una responsabilidad de todos», por lo que los cuidados «han de estar centrados en el respeto al proyecto de vida de la persona». «Casi todos los mayores aspiramos a envejecer en nuestra casa o entorno de siempre», han resaltado desde la FOAM, advirtiendo que «en la medida de lo posible, los cuidados deben ser en casa o como en casa». «Debemos dejar de pensar en macroresidencias nacidas del modelo antiguo de asilos e ir hacia pequeñas unidades de convivencia», ha apostillado.

Asimismo, han remarcado su apuesta por «desinstitucionalizar los cuidados en la medida de lo posible los cuidados», abogando por «centrarlos en conseguir que los últimos años se vivan en condiciones de calidad y con el mayor bienestar posible». «Conseguirlo es un objetivo de justicia y una responsabilidad social», ha concluido.

Por último, la FOAM ha puesto de relieve que los países «deben dar mucha importancia y valor a los cuidados en sus leyes y presupuestos» y ha lamentado que en España «estamos muy lejos de alcanzar una dotación presupuestaria digna para los cuidados», puesto que «la atención a las personas dependientes apenas recibe en 2024 el 0,8% del PIB procedente del presupuesto público, cuando la media europea es del 1,7% y en algunos países superan el 3,5%». «Es totalmente necesario aumentar ese porcentaje hasta alcanzar al menos el 2% en los próximos años», ha concluido.