Más del 90% de padres no pone reglas a sus hijos para usar la IA y el 60% apoya incluirla en colegios, según un estudio
El 91% de los padres no pone reglas a sus hijos para el uso de la Inteligencia Artificial, en concreto con el 42% de los profesores que sí plantean restricciones significativas al uso de esta tecnología.
Además, el 60% de los padres y madres están a favor de incluir la IA en el currículo académico, prácticamente la misma proporción que los profesores (56%). Sin embargo, el 57% de los padres valora de forma positiva el impacto de la IA en la educación que reciben sus hijos, por el 39% de los docentes que valora de forma positiva el impacto educativo de la IA.
Así lo revela la quinta edición del estudio de Empantallados.com y GAD3 sobre uso de la tecnología en los hogares españoles, que analiza el impacto de la IA en los principales entornos educativos: la familia y el colegio. La investigación se basa en una encuesta a una muestra representativa de padres y madres en España con hijos menores de 18 años, a adolescentes entre 14 y 17 años y a profesores de enseñanza no universitaria.
«Uno de los grandes debates en cuanto al uso de la tecnología digital ha sido el establecimiento de reglas y limitaciones que ayuden a los menores a hacer un buen uso de estas herramientas. En el caso de la IA, esta es una realidad con la que sí trabaja ya una minoría de profesores, pero acerca de la cual aún falta concienciación entre las familias», afirma la coordinadora de Empantallados.com, María José Abad.
A pesar de ser una tecnología disponible desde hace poco tiempo, ya han utilizado la IA el 69% de los padres y madres, el 73% de los profesores y el 82% de los alumnos; y quieren seguir aprendiendo más sobre IA el 78% de los padres, el 82% de los profesores y el 63% de los alumnos.
«Los elevados datos de primer uso de la IA y del interés por saber más son reveladores. Teniendo en cuenta que ChatGPT se lanzó al mercado en noviembre de 2022, momento a partir del que se popularizó la IA, sugieren un nivel de adhesión rápido. Además, se trata de una novedad que puede transformar la actividad de todos los sectores. La irrupción de la IA parece reunir los elementos necesarios para ser algo más que otro avance tecnológico más; a nivel sociológico, podría ser el salto hacia un nuevo paradigma», afirma el presidente de GAD3, Narciso Michavila.
Más del 70% de los entrevistados ha oído hablar de IA en redes sociales o a través de Google (73% de padres, 76% de profesores y 71% de alumnos). Los medios de comunicación han sido la segunda fuente de información para el 74% de los padres, el 86% de los profesores y el 54% de los alumnos.
La IA se ha convertido también en tema de conversación. Dos de cada tres alumnos (66%) ha hablado de IA con sus amigos; siete de cada diez profesores (70%), con sus compañeros y, en cambio, sólo uno de cada tres padres y madres (36%) en su trabajo.
Respecto al uso de la IA, la mayoría de entrevistados afirma haberle preguntado algo a un chatbot1, específicamente a ChatGPT: 71% de padres, 86% de profesores y 91% de alumnos. También más de la mitad ha interactuado alguna vez con asistentes de voz virtuales, como Siri o Alexa: 69% de padres, 49% de profesores y 63% de alumnos.
En menor medida han utilizado herramientas de edición y creación de imágenes mediante IA: 39% de padres, 45% de profesores y 48% de alumnos. La mayor parte de las familias que han utilizado IA han recurrido a ChatGPT para buscar información (69%). Y prácticamente una de cada dos (47%) para obtener nuevas ideas.
Los datos sugieren que se ha tratado de conversaciones exploratorias, ya que sólo uno de cada tres padres y madres (31%) utiliza esta tecnología de forma frecuente como fuente de información. En el caso de los alumnos, la cifra asciende hasta el 40% y, en el de los profesores, desciende hasta el 22%.
La investigación pone de manifiesto que los adultos son los que menos se fían de ChatGPT como fuente de información (50% en el caso de los padres y 37% en el de los profesores).
Según el estudio, sólo el 30% de los padres y madres confiaría en las redes como fuente de información; es decir, veinte puntos porcentuales menos que en la IA. Un patrón de confianza que se replica entre los menores: el 61% de los alumnos entrevistados confía bastante en ChatGPT, frente al 27% que lo hace en las redes.
La mayor parte de familias (83%) y profesores (90%) manifiestan preocupación por las políticas de privacidad y el uso de los datos personales por parte de las herramientas de IA. En la misma proporción señalan la necesidad de marcos legales actualizados que den seguridad al tratamiento de la información en estas aplicaciones. En cambio, este tema sólo preocupa a uno de cada dos menores entrevistados (48%).
Como sucede con el resto de las tecnologías digitales, los menores de edad parecen aceptarlas más fácilmente que los adultos. La mayoría considera que sabe más de la IA que sus padres y profesores. Aunque la mayoría de padres y madres manifiestan interés por la IA, se muestran divididos sobre su conveniencia para sus hijos: 43% lo recomendaría y 57%, no.
El estudio concluye que, probablemente porque la IA es muy nueva y aún no se conoce bien, no se observa una reflexión amplia sobre la conveniencia de limitar su uso a los menores, ya que sólo el 9% de los alumnos afirma que sus padres les ponen reglas para el uso de la IA, en contraste con el porcentaje de profesores (42%) que sí plantean restricciones significativas al uso de la IA.
Aunque no se sabe qué cambios puede impulsar la IA, los adultos consideran que esta tecnología será importante para sus hijos. El 61% de los padres piensa que tendrá un efecto positivo en el futuro laboral de sus hijos; 54% en el caso de los profesores.
No obstante, hay un aspecto práctico de uso de la IA que familia y profesorado rechazan. El 53% de los padres y el 67% de los profesores no recomiendan esta nueva inteligencia para hacer trabajos y deberes, aunque cuatro de cada diez padres y madres (40%) reconocen haber utilizado alguna vez chatbots para ayudar a sus hijos con la tarea escolar para hacer en casa.
El análisis de uso que los alumnos hacen de la IA confirma su preferencia por los fines prácticos. El 58% de los alumnos que ha utilizado IA ha recurrido a ella para realizar trabajos; el 56% la ha utilizado para complementar contenidos de materias; y el 50% para estudiar y preparar exámenes. En menor medida la emplean para acciones más creativas: sólo el 41% ha utilizado la IA para buscar nuevas ideas.
El 73% de los profesores ha utilizado herramientas de IA en alguna ocasión, siendo más común entre los menores de 40 años. Principalmente, para generar nuevas ideas para sus clases (64%) y para complementar contenidos (50%). Por etapas, destaca el uso que los profesores de FP hacen de ChatGPT para complementar contenidos: el 71% lo ha utilizado.
La mayoría de los profesores (56%) cree que sus alumnos no tienen mayor conocimiento que ellos en IA; y el 48% ha adaptado sus métodos de enseñanza a esta nueva realidad tecnológica, especialmente en la ESO. Las adaptaciones incluyen la integración de estas herramientas en la enseñanza (64%) y, en menor medida, los controles antiplagio (40%).
Los datos del estudio permiten concluir que, con sus distintos matices, familias, profesores y alumnos «ven en la IA una herramienta con potencial para el sector educativo, llamada a transformar procesos y formas de educar».