Un potente anticiclón trae tiempo estable, con pocas lluvias y nevadas, bancos de niebla y heladas

Un potente anticiclón, que actualmente abarca buena parte de Europa Occidental, dará lugar a una situación de bloqueo y a tiempo estable, con pocas lluvias y nevadas, bancos de niebla y heladas durante los próximos días, según ha explicado Rubén del Campo, portavoz de Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

De este modo, Del Campo ha explicado que dicho anticiclón permanecerá estacionario durante varios días, impidiendo la llegada de borrascas atlánticas que puedan dejar lluvias. «Durante el fin de semana, por lo tanto, apenas habrá lluvias ni nevadas y de la misma manera comenzará la próxima semana», ha subrayado.

No obstante, el portavoz de AEMET ha precisado que, a partir del próximo miércoles, puede llover algo en el extremo norte peninsular, sobre todo en el Cantábrico Oriental, con algunas nevadas en los Pirineos.

Rubén del Campo ha señalado que otro de los efectos de un anticiclón de bloqueo persistente consiste en la formación de bancos de niebla en zonas bajas, lo que sucede sobre todo en invierno. Estas nieblas, según ha explicado, son capaces de persistir durante toda la jornada.

Esto podrá ocurrir desde este fin de semana en la meseta norte. Las nieblas harán que el ambiente sea muy frío durante todo el día, no sólo de madrugada y a primeras horas. Además, podría tratarse, sobre todo en la meseta norte, de nieblas engelantes –la temperatura permanece muchas horas bajo cero y la niebla forma depósitos de hielo al chocar con superficies como el asfalto, árboles, señales de tráfico, etc–. «Esto puede complicar mucho los desplazamientos tanto por la reducción de la visibilidad asociada a la propia niebla, como por la posible presencia de placas de hielo», ha advertido.

Por otro lado, Del Campo ha indicad que las altas presiones persistentes, como impiden que las partículas y los gases contaminantes se puedan dispersar lejos de sus fuentes de origen, provocan también un empeoramiento de la calidad del aire en grandes ciudades y áreas industriales.

En concreto, respecto al fin de semana, se espera tiempo estable, tranquilo. Habrá ya bancos de niebla en la meseta norte que podrán ser persistentes y el viento, que está soplando estos días con fuerza, irá calmando en el nordeste, aunque todavía será intenso el viento de levante en el Estrecho.

Las temperaturas bajarán y habrá heladas de madrugada y a primeras horas de la mañana en el interior peninsular, sobre todo en zonas del norte, centro y este, donde las nieblas serán persistentes. Especialmente, esto puede suceder en la meseta norte, es decir, en buena parte de la zona central de Castilla y León, y también en el Valle del Ebro.

El ambiente será muy frío en todo el día. Zamora o Valladolid podrían no pasar durante el fin de semana de los 6 o 7 grados. A orillas del Mediterráneo, como es normal también, no hará tanto frío y en las horas centrales del día se podrán alcanzar los 17 a 19 grados.

En lo que respecta a la predicción del lunes y el martes, Del Campo ha puesto de relieve que serán jornadas similares, con tiempo anticiclónico y temperaturas, en general, sin grandes cambios en el oeste de la península y en ascenso en el este y Baleares.

Continuarán las heladas en el interior de la península, sobre todo en el norte y en el este, también en puntos de la zona centro. Nuevamente podrá haber bancos de niebla matinales, persistentes en la meseta norte, con temperaturas muy bajas todo el día.

Mientras que el martes, por ejemplo, ciudades del Mediterráneo como Valencia, Castellón, Barcelona o Murcia, rondarán o incluso superarán los 20 grados, en Valencia, Zamora o Valladolid no se pasará de 5 grados. De madrugada, estas ciudades de la meseta norte podrían bajar hasta los 3 o 5 grados bajo cero.

El miércoles y jueves, algunos frentes atlánticos podrían rozar el norte de la península, dejando cielos nubosos y precipitaciones en el extremo norte peninsular, que en los Pirineos, además, serán en forma de nieve. Las precipitaciones más abundantes se darían, sobre todo, en el Cantábrico Oriental, norte de Navarra y Pirineo aragonés.

Se seguirán registrando heladas en el norte y este del territorio y el ambiente más templado seguirá en el Mediterráneo donde, de nuevo, se rondarán o superarán los 20 grados.

Este tiempo estable, en general, es probable que continúe hasta el próximo fin de semana, coincidente con el inicio de las fiestas navideñas, algo que AEMET confirmará próximamente.

En cuanto a Canarias, se espera un fin de semana marcado por la presencia de polvo en suspensión, que dará lugar a calima, y por las rachas de viento que habrá en los próximos días. Alcanzarán intensidad fuerte o localmente muy fuerte. No se prevén lluvias.

La situación persistirá durante los primeros días de la próxima semana, aunque a partir del miércoles aumentará la nubosidad en el norte de las islas de mayor relieve y podría haber alguna llovizna, con temperaturas que oscilarán entre los 16 a 18 grados por la noche y los 21 a 23 grados durante el día en zonas costeras.