Los 27 examinan un último borrador para tratar un acuerdo que desbloquee la negociación migratoria
Los Veintisiete examinan este jueves un último borrador para fijar su posición respecto al mecanismo de crisis del Pacto de Migración y Asilo, último expediente por cerrar por los gobiernos para poder iniciar la negociación con el Parlamento Europeo, y desbloquear así las conversaciones entre los dos colegisladores para tratar de cerrar la reforma migratoria de la Unión Europea antes de que acabe la legislatura en junio del próximo año.
«Soy optimista y espero que los ministros, como ocurrió en junio, estén dispuestos a dar un último paso de manera que hoy, esperemos, puedan acordar la última pieza del Pacto y que todas las partes (de la reforma) puedan ir a trílogos», ha dicho la comisaria de Interior, Ylva Johansson, en referencia al punto muerto en que están las negociaciones con la Eurocámara por la falta de acuerdo sobre este punto en el Consejo.
El último borrador presentado la víspera por la presidencia española, al que ha tenido acceso Europa Press, mantiene la idea de ‘solidaridad a la carta’ que ya incluyó Bruselas en su propuesta de reglamento inicial, si bien desaparece la referencia a deportaciones «patrocinadas» como alternativa para quienes no acepten la acogida de un cupo de demandantes de asilo y amplía el menú a compensaciones financieras y apoyos al retorno.
El asunto no está formalmente en la agenda de los ministros de Interior de la Unión Europea que se reúnen en Bruselas por una cuestión de forma que complica modificaciones del orden del día en el último momento, pero según han indicado a Europa Press fuentes europeas será discutido más tarde a nivel de embajadores.
«No quiero aventurarme pero espero que al final del día podamos daros buena noticia», ha confiado en declaraciones a la prensa a su llegada al encuentro el ministro de Interior y presidencia de turno de la UE, Fernando Grande-Marlaska.
Así, Marlaska ha expuesto que la presidencia rotatoria ha trabajado «muy duro» con el resto de socios y la Comisión para avanzar estos meses hacia el acuerdo y que se han dado muchos progresos «en las últimas horas», por lo que aunque «quedan matices» para llegar al texto consensuado a Veintisiete cree posible que ocurra este mismo jueves.
Una de las claves para allanar el camino hacia el acuerdo ha sido el cambio de posición de Alemania, quien cuando se buscó el acuerdo en julio se abstuvo en una votación en la que también se abstuvo Países Bajos y votaron en contra Hungría, Polonia, Austria y República Checa. Con ese bloque se frustró la mayoría cualificada necesaria pero si la delegación alemana cambia su voto será suficiente para inclinar la balanza hacia la aprobación.
«Confío en que al final llegaremos a un buen resultado», ha dicho a su llegada la ministra alemana de Justicia e Interior, Nancy Faese, sin dar más detalles de la posición germana; a pesar de que la víspera fuentes del Gobierno indicaron a varios medios del país que el canciller Olaf Scholz había dado indicaciones a sus ministros de que Berlín no será responsable de obstaculizar las negociaciones del Pacto.
Faese sí ha dejado entrever que las reservas de su Gobierno tienen que ver con el temor a que las medidas previstas para hacer frente a la instrumentalización de la migración –en los llamados ataques híbridos de terceros países que favorecen el paso ilegal de personas para presionar a la UE– se traduzcan en una «excusa para reducir los estándares» de protección de los Derechos Fundamentales.
«Por ello hemos formulado condiciones que requieran que esos Estados agoten todos sus recursos antes de que medie una decisión de la UE. Y que decida la Unión Europea con mayoría cualificada y no el Estado miembro por sí mismo», ha dicho la ministra alemana, sobre la posibilidad de relajar las normas de asilo en situaciones de crisis excepcional para un miembro de la UE.
Marlaska ha confirmado que Alemania veía «alguna complicación» en el reglamento de gestión de crisis en lo que se refiere a las garantías para los colectivos «vulnerables», pero ha apuntado que las conversaciones están permitiendo llegar a un «equilibrio entre posiciones de distintos países».
Según informa: Europapress