Sánchez destaca ante la ONU las acciones de España en materia de igualdad y contra el cambio climático

El presidente de España, Pedro Sánchez, ha destacado ante la Asamblea General de la ONU las acciones de su Gobierno en materia de igualdad y contra el cambio climático «a través de los hechos» y no solo de palabra.

«España ha dicho ‘se acabó’. Se acabó con todas las consecuencias. Porque cada vez que una mujer avanza, avanzamos todos, hombres y mujeres, con ellas. Queda mucho camino por recorrer y muchas batallas por librar para alcanzar la plena igualdad. Ninguna más acuciante que la erradicación definitiva de la violencia machista, cuya existencia algunos se atreven a cuestionar contra toda lógica», ha proclamado Sánchez.

Además, ha destacado el «posicionamiento valiente y decidido de la sociedad civil en España» en materia de igualdad entre hombres y mujeres.

«No hay mayor antídoto contra el extremismo reaccionario que el feminismo. Sin duda, la gran causa de nuestro siglo: el siglo de las mujeres», ha añadido.

En base a ello, ha pedido que la igualdad de género se vea reflejada en las posiciones de máximo liderazgo, incluida la ONU y la Asamblea General, a las que ha pedido «tenerlo en cuenta».

Durante su discurso, Sánchez ha advertido sobre la «profunda crisis de desafección y desconfianza hacia las instituciones» por una ola «extremista y reaccionaria» que ponen en peligro «la defensa de la democracia, los derechos fundamentales, la igualdad y la justicia social».

En ese sentido, ha asegurado que estos movimientos comparten un discurso de marginación y criminalización de minorías desfavorecidas, de rechazo a la igualdad y al feminismo o el cuestionamiento de los Derechos Humanos, civiles y sociales.

«No es fácil combatir a quienes hacen de la mentira, el miedo y la manipulación su principal herramienta. Pero hay motivos para la esperanza en la determinación de muchas sociedades para preservar un legado de avances y progreso que no admite vuelta atrás», ha sostenido.

Sánchez ha recordado las amenazas contra la democracia que se han vivido en los últimos años, mencionando el asalto al Capitolio de Estados Unidos o al Congreso de Brasil, además de los recientes golpes de Estado en Níger y Gabón.

«El golpe de estado del pasado 26 de julio en Níger tiene graves implicaciones. Junto al de Mauritania, el de Níger era el único gobierno elegido democráticamente en el Sahel. Una región que acumula años de deterioro, y que corre el riesgo de convertirse en una cadena de estados fallidos que puede extender la inestabilidad a regiones vecinas como el Golfo de Guinea, ya azotada por la amenaza terrorista», ha anotado.

Así, el mandatario español ha garantizado su compromiso con el fortalecimiento de la democracia, y ha subrayado el «logro encomiable» del proceso de paz en Colombia y del «valiente» proceso constituyente en Chile.

En lo concerniente a Latinoamérica, Sánchez ha reiterado su compromiso «con el necesario retorno a la senda democrática en Venezuela para devolver la esperanza de un futuro de oportunidades para su población».

«Muchos conflictos siguen abiertos en el mundo; otros tantos, congelados. Por eso, quiero reiterar el apoyo decidido del Gobierno de España a la labor de los enviados del secretario general para el Proceso de Paz de Oriente Medio, en Siria, y en Libia», ha expresado.

Respecto al Sáhara Occidental, ha explicado que la solución debe ser «política», «mutuamente aceptable» y enmarcada en la Carta de la ONU y en las resoluciones del Consejo de Seguridad.

Del mismo modo, ha prometido seguir enviando ayuda humanitaria a la población saharahui que se encuentra viviendo en campamentos.

«España habla con hechos además de con palabras. Hemos adoptado objetivos más ambiciosos en materia de energías renovables y también de eficiencia energética a través del plan nacional integrado de energía y clima», ha manifestado Sánchez.

Estas acciones, ha anunciado, son la de aportar 225 millones de euros al Fondo Verde para el Clima, 20 millones de euros para
el Fondo de Adaptación y más de 17 millones de euros en instrumentos para «reforzar la justicia climática».

Además, ha pedido impulsar una revolución tecnológica y económica «sin parangón», que debe contar con un «apoyo social masivo» para combatir el cambio climático.

«No hay más alternativa que acelerar el despliegue de las energías renovables, de hacerlo además de manera justa y equitativa hasta triplicar su capacidad de generación al final de esta misma década», ha proclamado el mandatario español.

También ha pedido combatir la emergencia climática con «valentía y determinación» y «con solidaridad hacia los países más vulnerables».

Asimismo, el presidente español ha apelado a la defensa del multilateralismo a través de los mecanismos de la ONU, y que el reto se encuentra en «que el sistema funciona para todos» para combatir la «retórica de los enemigos del multilateralismo».

Para ello, Sánchez ha dado especial importancia a la defensa de la Agenda 2030 frente a «manipulaciones y falacias», y ha lamentado que el mundo no se encuentra «en el buen camino» hacia el cumplimiento de sus 17 objetivos.

Y es que, según ha avisado, para 2030 habrá 575 millones de personas en condiciones de pobreza extrema, 84 millones de niños sin escolarizar y la brecha de género será tan grande que «serían necesarios 300 años» para cerrarla.

Para evitarlo, el mandatario ha pedido dejar de medir las financiaciones en miles de millones para hacerlo en billones de dólares, además de «maximizar y optimizar la capacidad de financiación de los bancos multilaterales de desarrollo» y explorar otras vías para hacerlas más efectivas y democráticas.

Sánchez ha vuelto a condenar la invasión Rusia de Ucrania y ha ensalzado la respuesta de la Unión Europea, a la que considera encaminada a convertirse en vanguardia de la defensa de los bienes públicos globales, la democracia, la protección laboral y social y la apertura económica.

Por otro lado, ha pedido que «un futuro acuerdo sobre Gibraltar» entre la Unión Europea y Reino Unido debe ser «plenamente respetuoso» con la posición de la ONU, con la que España se alinea «plenamente».

También ha pedido impulsar una «política migratoria de referencia» para «controlar la inmigración irregular y ofrecer vías para una migración ordenada y conforme a la ley».

Por último, el presidente ha rendido homenaje a Emma Igual, la cooperante española que murió en Ucrania mientras trabajaba en labores humanitarias.