Detenidas más de 15 personas en una nueva jornada de movilizaciones contra el proyecto de reforma judicial en Israel
La Policía de Israel ha confirmado este martes la detención de más de 15 manifestantes en el marco de una nueva jornada de movilizaciones en contra del proyecto de reforma judicial impulsado por el Gobierno de Benjamin Netanyahu, integrado por partidos ultraortodoxos y ultraderechistas.
Así, catorce de las detenciones han tenido lugar en el centro del país, mientras que una persona ha sido detenida en la capital, Tel Aviv, mientras que otras dos han sido detenidas en la región costera, tal y como ha recogido el diario ‘The Times of Israel’.
Según los medios israelíes, una manifestante ha resultado herida de gravedad tras ser atropellada cerca de la ciudad de Raanana (centro), si bien la Policía ha apuntado que se habría tratado de un accidente y ha detenido al conductor para interrogarle. La mujer participaba en una protesta en la Ruta 531.
En el marco de las protestas, un grupo de manifestantes ha bajado a media asta la bandera de Israel en la sede del Ejército en Tel Aviv, después de que decenas de reservistas hayan advertido de que podrían suspender su labor en caso de que el Parlamento apruebe la reforma sin contar con la oposición.
Además, un grupo de manifestantes se ha concentrado frente a la sede del sindicato Histadrut para reclamar que convoque una huelga general para presionar al Gobierno e intentar que no siga avanzando en el proceso parlamentario, donde la coalición liderada por Netanyahu cuenta con mayoría.
El jefe de Histadrut, Arnon Bar-David, anunció en marzo que el sindicato se unía a una huelga general para protestar por el proyecto, en medio de una oleada de protestas a nivel nacional que llevó a Netanyahu a pausar los trámites parlamentarios y a iniciar contactos con la oposición, rotos ante la falta de avances.
Los críticos con la reforma judicial argumentan que se trata de un ataque al equilibrio de poderes de Israel, fundamentalmente a las bases en las que se asienta la democracia, ya que concede al Parlamento una influencia inusitada para revocar decisiones judiciales.
Según informa: Europapress