Las autoridades chilenas han detenido, por el momento, a diez personas por su supuesta responsabilidad en la ola de incendios que sufre el país y que ha provocado la muerte de 24 personas y miles de heridos. Así lo han explicado fuentes del Gobierno que confirman que hay que más de 200.000 hectáreas arrasadas y casi 300 focos activos. El fuego no cesa.
En concreto, el viceministro del Interior, Manuel Monsalve, ha confirmado que se han atendido a más de 1.100 personas en los centros sanitarios y que cerca de 800 viviendas han sido destruidas. El fuego afecta principalmente a zonas del centro y sur del país.
“Hay diez detenidos por eventual responsabilidad en la generación de incendios”, ha explicado Monsalve quien se ha mostrado inflexible respecto a las penas.
“Quiero reiterar, y quiero ser muy categórico respecto a esto, la generación intencional de incendios va a ser perseguida penalmente por el Gobierno”, ha advertido Monsalve tal y como recoge el periódico ‘El Mercurio’. Ha manifestado que las penas asociadas a este tipo de delitos oscilan entre los cinco y los 20 años de cárcel.
Alerta altas temperaturas
A esta dramática situación se suma la alerta por altas temperaturas que podría causar aún más peligro. “Estamos entrando en esta parte de la semana que es la más compleja. Nos enfrentamos a una alerta por altas temperaturas en varias regiones del país que ha movilizado un esfuerzo muy grande para evitar que los incendios se extiendan”, ha explicado la ministra chilena del Interior, Carolina Tohá.
Por su parte el presidente, Gabriel Boric, ha querido expresar una vez más su agradecimiento a los servicios de extinción y emergencias que están ayudando en esta situación y su apoyo a las familias de las víctimas.