Un hombre armado ha abierto fuego en el mausuleo en Teherán, poco después ha sucedido un incidente similar en el Parlamento iraní. En total los atentados han dejado 12 muertos y 42 heridos.

Estos atentados, llevados a cabo casi simultáneamente han sido contra dos lugares muy simbólicos y en plena crisis entre los países del Golfo por la decisión de Arabia Saudí de romper relaciones con Qatar a los que han acusado de apoyar a grupos terroristas y favorecer política de Irán.  Los dos hombres que irrumpieron en el mausoleo situado en el sur de la capital han disparando a las personas presentes. Uno de ellos se ha inmolado  y el otro ha sido abatido por la policía. La tumba del ayatolá, el principal impulsor de la Revolución Islámica de 1979 puso fin al régimen del sha en Irán. Dos horas después, cuatro hombres han entrado en el Parlamento iraní. Uno de ellos se hizo estallar en el cuarto piso y los otros han sido abatidos por las fuerzas de seguridad. El Daesh ha reivindicado los ataques. 

A pesar de la tensión entre los países,  Los Emiratos Árabes Unidos  han condenado los ataques.