Hollande rinde homenaje a las víctimas del terrorismo islamista en París
La sala Bataclan fue uno de los escenarios de lo atentados que sacudieron París hace justamente un año. Pero la sala resurgió anoche y volvió a vibrar ante un entusiasmado público. Y es que la estrella de rock británico Sting protagonizó la reapertura de un lugar que vio como tres milicianos islamistas mataban a 90 personas en uno de los peores ataques que ha sufrido Francia.
El presidente de Francia, François Hollande, el primer ministro, Manuel Valls y la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, han terminado el homenaje a las víctimas de la masacre del año pasado en la sala de conciertos parisina Bataclan, escenario de la matanza más sangrienta de la cadena de ataques perpetrados en la capital francesa.
Hollande ha atendido en silencio a la enumeración de los nombres de las 90 víctimas mortales antes de saludar a las familias de los fallecidos y dedicar unas palabras de aprecio a las fuerzas de seguridad que entraron en la sala para acabar con los terroristas.
El presidente de la República, Françoise Hollande también participó en un acto frente a la Belle Equipe, el restaurante donde los criminales terroristas islamistas asesinaron a diecinueve personas
La llegada a Bataclan se produjo tras una breve comparecencia ante la terraza del restaurante La Belle Equipe, otro de los escenarios de los ataques, y en el que perdieron la vida 19 personas a las que se dedicó una placa en su honor, como ya sucediera en otros lugares afectados como el Estadio de París, el bar Le Carillon, el restaurante Petit Cambodge y el bar cafetería Ala Bonne Biere.
Al homenaje asistieron los miembros de la banda de rock Eagles of Death Metal, el grupo que estaba tocando en la sala en el momento del ataque, el que consiguieron escapar ilesos. Tras un minuto de silencio, los mandatarios se dirigieron a las familias de los fallecidos, con quienes conversaron unos instantes en privado antes de dar por finalizado el homenaje.