Mujeres en el Ejército Saudi ¿un paso para la igualdad? En140″

Las mujeres saudíes recibirán instrucción militar. Dicho así, puede parecer que esta medida supone un paso más hacia la igualdad entre hombres y mujeres en este país de Oriente Medio. Pero no, la medida propuesta por la Shura, el Consejo más influyente en el reino teocrático de los Al Saud, obedece a medidas de seguridad.

Es decir, que la inclusión de las mujeres en este ámbito responde a la necesidad de que las mujeres participen en la desarticulación de células terroristas de mujeres o lobas solitarias enroladas en grupos terroristas como Estado Islámico. Porque el avance del terrorismo islámico se ha convertido en preocupación principal para los dirigentes saudíes.

La Shura se apoya en que el Islam no impide a las mujeres participar en asuntos militares y recomienda que sean entrenadas en el manejo de armas ligeras y que su papel puede resultar efectivo en operaciones de seguridad, inspecciones, interrogatorios y gestión financiera.

Lo que no explica Saudi Gazette, el medio local que da la exclusiva, es si las aspirantes a la milicia precisarán del permiso del varón para acceder al Ejército, que es lo que necesitan hoy para viajar, trabajar, votar o ser intervenidas quirúrgicamente, por ejemplo.

La brecha de la igualdad de género es un auténtico abismo en Arabia Saudi. Hace apenas unos meses estrenaron el derecho al voto o a ser cargo electo en las municipales. Una libertad común a ojos occidentales pero muy limitada en este país. La libertad de elección o de sufragio también depende de la tutela del varón. La doctrina religiosa wahabí -la más radical del islam- prohíbe a la mujer conducir el vehículo por los riesgos de relacionarse con varones en caso de avería.

Tampoco pueden salir solas de casa, ni para hacer la compra, ni para ir al médico sin la presencia de la ‘carabina’ masculina. Los espacios públicos están segregados por sexo. La mayoría de edificios tienen una entrada para hombres y otra para mujeres. Ni siquiera tienen libertad para elegir su ropa, se ven obligadas a utilizar la ‘abaya’, una prenda que cubre todo su cuerpo por completo. Simplemente enseñar el dedo de un pie puede acarrear diversos tipos de multas muy estrictas de la policía religiosa.

Lo dicho, una esperanzadora noticia para que algo cambie en Arabia Saudí, aunque mucho nos tememos que no dejará de ser un grano… en la arena del desierto.