Recurrido ante los tribunales, tanto por los profesionales como por las comunidades autónomas, con amenaza de “huelga competencial” y sin aplicación posible hasta que la comisión de turno resuelva cuáles son los medicamentos a prescribir, hecho que está provocando numerosas controversias. Esta es la situación a primeros de año del Real Decreto de Prescripción Enfermera que ha sacado adelante el gobierno en funciones en contra de todo y todos.
Todo un conjunto de reacciones calificadas como “polémicas estériles” por el titular en funciones de Sanidad, Alfonso Alonso, que no cree oportuno hacer caso de la petición de seis autonomías solicitando la convocatoria urgente de un Consejo Interterritorial para abordar de manera monográfica el problema de la enfermería en España generado con la aprobación del Real Decreto de Prescripción Enfermera, un colectivo que agrupa a 270.000 profesionales.
“Ya han reaccionado con mucha virulencia y, por tanto, no temo nada. He evitado meterme en otro tipo de polémicas que creo que son estériles, que seguramente obedecen a otras cuestiones, y que, sinceramente, no creo que formen parte de mi deber como ministro”, ha señalado Alonso ante las críticas a su Real Decreto.
Una buena parte de los consejeros de Sanidad autonómicos entienden que la aplicación del Real Decreto de Prescripción Enfermera puede resultar nocivo para el Sistema Público de Salud . Carmen Montón, titular de Sanitad de Valencia, afirma que el real decreto “contraviene lo establecido en la Ley de Garantías y Uso Racional de Medicamentos y Productos Sanitarios, va en contra de los intereses de los usuarios al comprometer su accesibilidad al Servicio Sanitario Público”.
Argumento que también comparte el sindicato Satse en el recurso presentado: “Entre otros efectos perniciosos para el sistema sanitario, muchos servicios y unidades perderán la agilidad en la asistencia sanitaria que dispensan, y se hará necesario implantar de forma inmediata y urgente nuevos sistema de trabajo con los equipos multidisciplinares existentes”. El escrito concluye: “Su aplicación afectará muy negativamente a la práctica diaria, perjudicando la calidad asistencial que reciben los usuarios y pacientes”.
Aunque para la aplicación de los medicamentos sujetos a prescripción enfermera, como recuerdan desde AME, hay que resolver el “un procedimiento hiperfarragoso para su elaboración y validación mediante comisiones formadas por un 50% de personal político y un 50% representantes colegiales de enfermería y medicina, lo que hace que a todas luces sea prácticamente imposible aprobar alguno”.
Los profesionales denuncian que SATSE y el Consejo General de Enfermería ahora se quejan por algo que no defendieron en su momento
Una versión no solo compartida desde el ámbito político sino también desde el profesional. Aunque en este último, las acusaciones no solo apuntan al ministro Alonso, también a los miembros de la Mesa de Enfermería -Consejo General de Enfermería y sindicato SATSE- a quienes hacen responsables directamente de la situación que vive el colectivo por no defender adecuadamente sus intereses.
“Este RD no es más que el desarrollo de una Ley del año 2009 (Ley del Medicamento); nadie se movilizó en aquella fecha. Sabéis lo que es un RD, pues es, una norma que regula técnicamente lo que una ley ya fijó antes. Y en la Ley del 2009 ya se dijo que sólo eran profesionales prescriptores: los médicos, odontólogos y podólogos”, subraya Chema Antequera, autor del blog Defensor de la Enfermera.
“Durante la tramitación y aprobación de las leyes precursoras del presente RD de dispensación de medicamentos y productos sanitarios por enfermeros, estaban los mismos representantes que son ahora ( CGE, SATSE ) con sus presidentes a la cabeza, pero los detalles de dichas leyes en esos momentos no les parecieron relevantes para debatirlos con las enfermeras de base, ni las consecuencias de ellas, o, ¿no fue así?”, inciden desde la Asociación de Enfermería Madrileña (AME).
Inseguridad jurídica del personal de enfermería
Tampoco existe unanimidad en torno a la inseguridad jurídica en la que queda el personal de enfermería con la aplicación del Real Decreto. Así, mientras las anunciadas movilizaciones de SATSE y Consejo General de Enfermería se justifican en que “el profesional de Enfermería podrá ser denunciado por actuar fuera de su ámbito competencial, con las graves consecuencias que ello puede tener al poder incurrir en un posible intrusismo profesional”.
Otros colectivos limitan el ámbito de su aplicación. Antequera, con cierta ironía remata “cuando leo decir que con este RD lo que antes era “alegal” y ahora es “ilegal” debo tener cerca la Adrenalina porque casi entro en Shock Anafiláctico… Este RD, como la Ley del 2009, regula lo que regula. Ahora la enfermera trabajará con la misma inseguridad que lo hace desde el año 2009″.
Y remata: “Para ser ilustrativo, las vacunas que son prestaciones sanitarias reguladas y protocolizadas no son afectadas por el RD en relación con el acto de administrarlas, la enfermera que está en una RCP ni por asomo es afectada por este RD, la enfermera que coge vía y administra SF/G a paciente hipovolémico ni por asomo está afectada por el RD. Es decir , y me repito, la administración de medicamentos por una enfermera no ESTÁ AFECTADO POR ESTE RD”.
Desde AME, se reclama a los representantes de la Mesa de Enfermería que además de animar a la huelga se informe al colectivo de “las consecuencias éticas y legales que podría provocar una huelga competencial como la que se está animando a realizar”
La cualificiación profesional y los cursos de acreditación para la prescripción enfermera
Otro asunto que divide al colectivo de enfermería es la necesidad de realizar un curso de acreditación para los enfermeros. “Lo que sí es criticable del RD pero ya se sabía, es que deban acreditarse los enfermeros para indicar medicamentos no sujetos a prescripción médica cuando ya se pueden comprar por internet. Y además estoy totalmente en desacuerdo con el hecho que sea el CGE el que realice cursos previos para acreditar cuando esta función debería residenciarse en las propias Consejerías” .
Más contundente, si cabe, es la posición de AME sobre estos cursos, quien además de preguntarse para que vale cursar asignaturas de farmacología en el Grado de Enfermería lamenta que ” aún nadie nos ha dicho que organismos ofrecerán los dichosos cursitos, cuál será su importe y quien lo sufragará. Por otro lado, ni la Mesa de la Profesión Enfermera ni aún ningún gerente o consejero de sanidad han aclarado nada acerca de La situación en que quedarán aquellas compañeras que tras el plazo de 5 años dado en el RD no queden acreditadas para esta competencia,”
Entre tanto, el trabajo se acumula en la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Supremo, que tendrá que decidir sobre el recurso en contra del Real Decreto presentado por el Satse, la Consejería de Sanidad de Cantabria y la de Extremadura, quien ya ha recibido el plácet del Consejo de Gobierno extremeño para recurrir la norma.
Y la primera decisión será si se suspende o no la aplicación,de manera cautelar,de la norma.