Al menos quince agrupaciones de los veintiún distritos de Madrid cambiaron la orientación de su voto dejando sin apoyos al actual portavoz del PSOE, Jaime Lissaveztky. Esta ‘traición’, en palabras de un dirigente socialista, sería la verdadera causa de su abandono de la carrera electoral interna abierta el pasado fin de semana. Fuentes próximas a Lissaveztky aseguran que antes del verano contaba con una solida mayoría entre los aparatos locales de los distritos, históricamente enfrentados a Tomás Gómez, y entre el grupo de concejales, pero que tras las vacaciones, el secretario general socialista madrileño hizo valer su pacto con Pedro Sánchez para que en Madrid solo se presentase su colaborador, Antonio Carmona. Jaime Lissavetzky, ya retirado de la carrera electoral ha sido el único dirigente socialista que siendo portavoz en el Ayuntamiento en la oposición ha permanecido el mandato completo a pesar de haber perdido las elecciones.