Enrique del Olmo, contra el aparato del PSM
Ayer presentó en la agrupación socialista de Chamberí su campaña para la elección municipal el militante Enrique del Olmo, hasta el momento el único que ha hecho efectiva su intención de reunir los avales necesarios para formalizar su candidatura. Tras el descarte de Lissavetzky, también parece segura la candidatura de Antonio Carmona, que tendrá que medirse con un candidato ausente de los cargos públicos desde que fuera concejal en 1979 y muy próximo a plataformas ciudadanas y mareas sociales. Del Olmo, defensor de una alianza de izquierdas para gobernar Madrid, se opone así al acuerdo cerrado entre los dirigentes de su partido para que haya candidatos únicos a las instituciones más importantes de Madrid, sorteando así el compromiso de celebrar elecciones primarias, tal y como desea Tomás Gómez, quién teme por su reelección dados los pésimos resultados obtenidos en las recientes elecciones y sus sorprendentes giros políticos de las últimas fechas.
Del olmo ha denunciado reiteradamente los límites a la extensión de la pluralidad que vienen impuestos por el sistema de avales y el hecho de que las elecciones primarias sean internas y no abiertas a los ciudadanos de la región y de las ciudades. Durante el acto celebrado ayer, Del Olmo criticó que a las Juventudes Socialistas se les haya retirado el voto en este proceso.